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¿Qué pide ahora el inversor con perfil moderado?
Perspectivas de mercado

¿Qué pide ahora el inversor con perfil moderado?

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10 MAY, 2019

Por Alfonso Elizalde Montagut

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Inversor con una tablet estudiando rentabilidades y estillos de inversión

Cada inversor, cada cliente, cada persona es un mundo. En finanzas, el posicionarse en un perfil inversor es una utopía. El mundo cambia tan rápido que nos obliga a estar continuamente adaptándonos a las nuevas normas de juego.

Hace 20 años existían pocas alternativas de inversión. Ibas a tu entidad financiera y te ofrecían un depósito remunerado, fondos de inversión de la propia Gestora o invertir en acciones. El perfil del cliente se definía por el propio conocimiento que se tenía de él y la inversión se realizaba, en la mayoría de los casos, en base a la confianza y/o recomendación del interlocutor de la Entidad.

Es a partir del año 2000 en el que empieza a irrumpir la filosofía de la arquitectura abierta, tema que se expande con fuerza en los últimos 10 años. Esta beneficiará a todos los actores, al inversor (tiene mayor gama de producto), a las Gestoras extranjeras (les permiten distribuir su producto) y a las Entidades Locales (cobro de comisiones de distribución y gestión). Este tema abrirá un mundo de posibilidades de diversificación de las inversiones.

La entrada en vigor de MiFID y actualmente MiFID II, nos obliga a perfilar al cliente.

La CNMV define el perfil de inversión como:

Definir el perfil del inversor es el punto de partida para la toma de decisiones, y para ello debemos tener en cuenta diversos factores:

Centrándonos en los inversores moderados, los podríamos definir como aquellos que buscan un equilibrio entre rentabilidad y riesgo. Que buscan una rentabilidad superior a la inflación, e invierten con objetivos a medio y largo plazo. Además se considera que pueden soportar mejor períodos de pérdidas. El capital está invertido en activos de renta fija y suelen destinar en torno a un 25-40% del dinero a activos de riesgo.

La cultura de los inversores ha evolucionado a la par que ha ido evolucionando la industria, por lo que antiguamente a un inversor conservador se le recomendaba invertir en un depósito o fondo de renta fija, a un inversor moderado se le aconsejaba desde la misma sucursal invertir a través de un fondo mixto, y un inversor agresivo invertía en acciones o fondos de renta variable de la misma entidad, y se dejaba la inversión estática, si hacer ningún tipo de gestión, a pesar de la evolución de los mercados.

Esta situación se continua dando en muchas entidades, ante la “ignorancia” de muchos clientes que continúan confiando en sus interlocutores de banca.

Ante la globalización de los mercados, la evolución de la tecnología, la enorme diversidad de productos financieros y de inversión, la volatilidad de los activos, y los cambios regulatorios, hoy en día es imprescindible el perfilar correctamente a los clientes, y el efectuar un seguimiento muy próximo de las inversiones.

Invertir no es fácil, y para hacerlo con éxito se deben cumplir varias premisas: Se debe planificar y diversificar la inversión, asumir riesgos, ser paciente, hacer seguimiento y todo ello hacerlo de la mano de un profesional.

Esto sólo se puede hacer desde una posición de independencia, como la nuestra, en la que no estamos sometidos a ninguna política comercial, y en la que asesoramos de forma absolutamente independiente a nuestros clientes, tratando a cada uno de ellos de forma exclusiva, confeccionando un “traje a medida” para cada uno de ellos, y seleccionando los mejores activos en cada momento.

Nosotros trabajamos de la mano de nuestro equipo inversor, “nuestra cocina”, donde se seleccionan y se sigue de forma muy directa todos los activos, y colaboran en la confección y seguimiento de las carteras de nuestros clientes. Ofrecemos profesionalidad, independencia en la gestión, diversificación, transparencia, seguimiento, y la confianza de estar en las mejores manos.

Las posibilidades para componer una cartera son infinitas y la mejor forma de hacerlo es efectuar una correcta diversificación de activos, de zonas geográficas, combinando diferentes tipos de estrategias y divisas.

Dada la poca rentabilidad que ofrece la renta fija y que en muchos casos es incluso negativa, –pero que, en cambio, es uno de los tipos de activo que tradicionalmente ha tenido mayor peso en los perfiles moderados-, se ha producido un aumento en los activos de riesgo de las carteras lo que aún obliga más a las entidades a lograr construir carteras bien diversificadas con activos que aporten cierta descorrelación y que contribuyan a bajar el nivel de volatilidad de la misma y la mejor manera de lograrlo es conociendo muy bien al cliente y evitando las “carteras tipo” tan habituales en la banca tradicional.

¿Qué pide ahora el inversor con perfil moderado?

Para componer una cartera con perfil moderado, cuyo objetivo final sea obtener un crecimiento del capital a largo plazo, teniendo como prioridad su preservación en un horizonte temporal adecuado, debemos incorporar activos con diferentes políticas de inversión.

Evidentemente el abanico de clientes con perfil moderado es muy amplio, y nos podemos encontrar clientes moderados conservadores o moderados más agresivos, por lo que el peso que se asignará a renta variable variará en cada caso.

Como ejemplo, podemos plantear dos carteras modelo:

Perfil moderado conservador
Perfil moderado agresivo

Desde AAA Capital estamos convencidos que la base del éxito es la selección diversificada de los mejores activos con mejor comportamiento internacional. Adecuándonos al perfil de nuestros clientes, conformamos y ofrecemos la cartera que mejor se ajusta a sus necesidades en cada momento.

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